Se trata de una de las pocas escenas invernales conservadas del pintor. En los catálogos del Museo aparece descrita como una escena de patinadores, a pesar de que sólo tres de los muchos personajes representados están patinando y uno calzándose los patines. En los catálogos de 1873 y 1878, se hace constar que, a pesar de la firma, "hay quien la cree de Bonaventura Peeter" y en el catálogo de 1885 se dice que Bredius lo atribuyó a Cornelis Vroom. Entre 1889 y 1910 fue incluida en el catálogo como original del hijo, Jan Dubbels (1705-1727). Valdivieso sitúa esta obra en la primera época del pintor, h. 1640-50. Sin embargo Middendorf, que localiza la escena en el muelle oriental del puerto de Amsterdam, la ordena hacia 1656-1660. En efecto, el colorido brillante corresponde a la segunda etapa del pintor, cuando, después de trabajar en el taller de Vlieger, abandonó la gama monocromática característica de sus primeras obras. Además, la estructura compositiva clasicista a base de horizontales y verticales y la colocación de la línea del horizonte muy baja -de forma que le cielo ocupa casi tres cuartas de la composición- permiten relacionarla con las características vistas del puerto de Amsterdam -en este caso sería de su muelle oriental- que Hendrik Dubbels cultivó entre 1654-1660.
La pincelada es delicada y uniforme y, como es característico de estas vistas de Dubbels, la entonación fría, a base de azules y grises con toques de rosa en el horizonte. La multitud de figuritas ocupadas en diversas actividades lúdicas y agrupadas formando pequeñas escenas de género, que da vida a la escena, siguen la tradición de Hendrick Avercamp (1585-1634).
Se conocen otros dos ejemplares de este escena: en la colección Steinmeyer (Colonia) que Hofstede de Groot catalogó como original de Jan de la Capelle (1626-1679), pero que Valdivieso cree copia del ejemplar del Prado y de inferior calidad; y Puerto con figuras subastado en Barcelona como obra de Abraham Storck, y que Valdivieso considera réplica del original del Prado.
En 1814 figuraba en el Palacio Real. Ingresó en el Museo después de 1834. Es inventariado en 1849 y no quedó recogido en el catálogo hasta 1873.