Venus, diosa romana del Amor y la Belleza, es accidentalmente herida por su hijo Cupido con una flecha, desencadenando así su pasión por Adonis, una historia de amor que acabara con la trágica muerte del héroe. La escena está basada en las Metamorfosis de Ovidio (libro X), una de las fuentes mitológicas más importantes para los artistas de la época.
La composición y técnica pictórica de esta obra es un buen ejemplo de las diferentes influencias que Annibale Carracci recibió y reinterpretó a lo largo de su vida. El fondo de paisaje y la luz crepuscular enlazan con el cromatismo veneciano y la producción de Tiziano, mientras que el delicado pero potente clasicismo de las figuras fue desarrollado por el artista a partir de la escultura greco-romana y la obra de Correggio, Rafael y Miguel Ángel.
Se conservan varios dibujos preparatorios para esta obra en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en Madrid, en la Galleria degli Uffizi en Florencia y en el British Museum en Londres, y una copia antigua en el Kunsthistorisches Museum de Viena.
Obra maestra del menor y más reputado miembro de la familia Carracci, fue adquirida por Felipe IV en 1664 a los herederos del aristócrata genovés Giovanni Francesco Serra (1609-1656).