Sansón fue atacado por un león al que venció con su fuerza colosal infundida por Dios (Jueces 14, 6). Forma parte de una serie dedicada a este personaje bíblico, cuya vida fue interpretada como una prefiguración de la de Cristo. En concreto, este episodio se interpreta como la victoria de Cristo sobre el pecado. Giordano concibe una escena cargada de tensión, dinamismo y violencia, en la que destaca la poderosa anatomía del personaje bíblico.