Se trata de dos figuras masculinas desnudas, luchando, representadas sobre una base que imita un paisaje rocoso. Copia del grupo Los luchadores de los Uffizi, descubierto hacia 1538, sin cabezas y con los brazos y las piernas mutilados, junto a un grupo de Niobe cerca de la puerta de San Juan de Letrán, en Roma. A finales del siglo XVI se le añadió la cabeza del luchador situado encima y el brazo derecho. Adquirido por el cardenal Ferdinando de Medici, se describe en Roma, en Villa Medici, en un grabado de 1594 y en el inventario de 1598. En 1638 aparece el grupo completo en un grabado de Perrier. En 1677 fue restaurado por Ercole Ferrata, antes de que en 1688 se colocara en la tribuna de los Uffizi, donde permanece hasta hoy. Palomino citó este tema entre las obras traídas por Velázquez de Italia, como de "valiente artífice", sin hacer referencia al material pero, tanto este autor como Ceán Bermudez, reiteraron el tamaño de la escultura "menor que el natural". Blanco (1957) lo catalogó como renacentista entre los trabajos traídos por Velázquez de Italia. El hecho de que este tema se relacione siempre en los inventarios reales en yeso lleva a pensar en una posible procedencia distinta. Además el material en que ha sido realizado hace descartar la posibilidad de que hubiera sido hecho en España, a partir del modelo citado. El serpentín, verde de Prato, fue descrito por Vasari como material para columnas, bases o suelos. Para esculturas fue utilizado en Italia muy tardíamente, a fines del siglo XVIII o principios del XIX y requiere gran destreza técnica. Por lo tanto, con los escasos datos disponibles hasta el momento, hay que situar este trabajo en Italia y en esa época.