La Virgen María es coronada al mismo tiempo por Dios Padre y por Jesucristo y sobre ellos aparece la paloma de Espíritu Santo, como vértice superior del rombo que forman las figuras.
Inspirada en una estampa de Alberto Durero, se conocen varias versiones muy semejantes entre sí, destacando la pintada para el retablo de la Iglesia parroquial de Talavera la Vieja (Cáceres), actualmente en el Monasterio de Guadalupe.
Está firmada en minúsculas griegas abajo a la derecha.
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