El liberal José María Torrijos (1791-1831), acompañado por sus compañeros, es fusilado por las tropas de Fernando VII (1784-1833) en las playas de Málaga.
Obra maestra de la pintura de historia del siglo XIX español, fue encargada en 1886 directamente por el Gobierno liberal de Praxedes Mateo Sagasta (1825-1903) durante la regencia de la reina María Cristina de Austria (1806-1878), como ejemplo de la defensa de las libertades para las futuras generaciones.
El militar José María Torrijos (1791-1831) llegó a ser capitán general de Valencia, mariscal de campo y ministro de la Guerra durante el Trienio Liberal (1820-1823). Tras la vuelta al absolutismo, se sublevó y fue víctima de una emboscada preparada por el gobernador Vicente González Moreno, quien le había asegurado el triunfo de la rebelión.