Vaso de pie alto formado por una montura de plata dorada y cuerpo consistente en un cuenco oval poco profundo de jade, lo mismo que la tapa. El vástago, constituido por cuatro estrechas cartelas; el pie y el resto de la guarnición, de plata dorada. El jade es nefrita, material en el que se labraron los vasos chinos que sabemos apareciaban y poseían en buen número Luis XIV y su hijo. Estos vasos fueron realizados por el platero parisino de siglas IR entre 1687 y 1689. Esta obra forma parte de la herencia recibida por el rey Felipe V (1683-1746) a la muerte de su padre, el Gran Delfín, en 1712.