José Camarón Boronat, fue un pintor español de la segunda mitad del siglo XVIII. Pintor nacido en Segorbe el 18 de mayo de 1731 que dio origen a toda una saga de pintores entre los que sobresalen José Juan Camarón Meliá y Vicente Camarón. Su padre Don Nicolás le educó en el arte, especialmente en la escultura, que era su especialidad. Cuando tenía 18 años y habiendo fallecido su padre, Camarón comenzó a estudiar la pintura, que era su gran afición. En 1752 se trasladó a Madrid con el objeto de perfeccionar sus estudios. Su obra se caracteriza en general por el efecto claroscuro, la belleza del colorido, la armonía de la composición y la cuidada técnica, así como por su gama cromática de tonalidades suaves y en ocasiones nacaradas y por sus grandes composiciones resueltas con gran maestría. De entre sus obras cabe destacar los frescos de la catedral segorbina que inició en el año 1800. Tras su muerte, ocurrida tres años más tarde, la obra fue continuada por su hijo Manuel Camarón Meliá que la finalizó en 1806. Es también el autor de los lienzos y frescos que decoran la Iglesia Parroquial de Benicasim en la que trabajó hasta 1776. En 1765 fue nombrado director de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos de Valencia. En su primera etapa se dedicó a la pintura de paisajes, pintó miniaturas y copió a los maestros del barroco, como Tiziano, Rubens, Van Dyck y Murillo. En 1754 regresó a Valencia, donde fue nombrado profesor de pintura en la recién creada Academia de Santa Bárbara. La Academia de San Fernando de Madrid le aceptó en 1762 como miembro de mérito, y en 1768 figura entre los fundadores de la Academia de San Carlos, donde desempeñó la plaza de Director de Pintura, vacante desde el fallecimiento de Cristóbal Valero en 1790, y entre 1796 y 1801 el puesto de Director General. Fue amigo de Francisco Pérez Bayer, quien le encargó que decorara con sus pinturas la iglesia de Santo Tomás de Villanueva, que estaba acabando de construir en Benicasim,. Además de este trabajo, Pérez Bayer, le encargó otros tantos que se encuentran en distintos organismos valencianos y catalanes. De entre sus obras cabe destacar los frescos de la catedral segorbina que inició en el año 1800. Tras su muerte, ocurrida tres años más tarde, la obra fue continuada por su hijo Manuel Camarón Meliá que la finalizó en 1806.