Dentro de la amplia tipología de las "Afroditas púdicas" helenísticas, la presente obra parece basarse en un original de fines del helenismo medio, aunque mantenga las formas clasicistas que caracterizan a todas las herederas de la "Afrodita Cnidia". Según se deduce de una Venus semejante conservada en Nápoles, la diosa ocultaba su pecho con la mano derecha y sostenía con la izquierda un pliegue del manto sobre el pubis. La escultura sufrió cambios importantes al ser restaurada en el Renacimiento: el pliegue del manto sobre el pubis fue retallado como una concha, y desde ella se practicó un agujero a través de la figura para utilizarla como fuente. Se añadieron además, en esa época, dos inscripciones: la primera atribuye la responsabilidad de su reutilización a un desconocido B. Rovira, con fecha de 1533, y la otra, no sin cierta intuición estética, identifica la pieza como "obra de Praxíteles".