Es la tabla central del retablo que encargó Luis de la Cerda, duque de Medinaceli, para la capilla de Santa Catalina, o de los Arce, de la Catedral de Sigüenza, y que se conserva parcialmente en la sacristía de la capilla. De doble advocación, tenía un banco y diez tablas distribuidas en cinco calles, cinco de ellas propiedad del Prado. Los dos santos titulares aparecen identificados por sus atributos: San Juan Bautista señala al Cordero de Dios y Santa Catalina lleva la palma y la rueda de su martirio.
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