Esta es una de las obras maestras de Lorena y de la historia de la pintura de paisaje, e ilustra el embarco de Santa Paula hacia Palestina, despidiéndose de sus hijos.
Santa Paula vivió en Roma en el siglo IV d. C. Tras repartir sus riquezas entre los pobres se marchó a Belén a seguir una vida de eremita bajo la guía de San Jerónimo, a quien atendía y ayudaba en sus estudios, y con quien fundó numerosos monasterios.
La composición, extraordinariamente clásica, combina las masas arquitectónicas con la vegetación, creando una gran sensación de profundidad gracias al resplandor de luz que difumina el horizonte.
En una lápida a la derecha se puede leer IMBARGO STA PAVLA ROMANA PER TERRA SANTA; y en un sillar: PORTUS OSTIENSIS A (AVGVSTI) ET TRA (IANI).
Este cuadro fue pintado para el Palacio del Buen Retiro del rey Felipe IV (1605-1665), siendo compañera de El Arcángel Rafael y Tobías (P2255), Paisaje con el entierro de Santa Serapia (P2252) y Paisaje con Moisés salvado de las aguas del Nilo (P2253), también en las colecciones del Museo del Prado.
Étiquettes: