María, tiene en su regazo al Niño, que juega con un libro, en clara alusión a los textos sagrados que anunciaban la misión redentora de Cristo. En lo alto un ángel corona a María.
Las dos figuras dispuestas bajo un nicho de tracería gótica recuerdan el Descendimiento del mismo artista (P2825). Además, el fondo neutro y el carácter fuertemente plástico de las figuras, dotadas de gran volumen, hacen que parezcan esculturas policromadas.
Denominada también Madonna en rojo o Madonna Durán, se considera de forma unánime obra original de van der Weyden, de la que existieron en España numerosas versiones. Es obra de gran intimidad y calidad técnica, destacada en su producción, en la que se aprecia la influencia de su maestro Robert Campin.
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