Imagen del Emperador (1500-1558) con la armadura que llevó durante la Batalla de Mühlberg, acompañada de los atributos de poder habituales: Toisón de Oro y banda cruzada.

La profusa talla de la armadura muestra numerosos motivos. En el pecho un bajorrelieve representando a Cristo en pie sobre la Cruz, alude a la condición del Emperador como “soldado de Cristo” o “defensor de la Fe”. En las hombreras una figura alada que porta una palma simboliza la Victoria. En el pedestal se representa un águila, símbolo del Imperio, flanqueada por las figuras desnudas de un hombre y una mujer, motivos que fortalecen la imagen renacentista de un héroe clásico. Del mismo modo, la expresión autocontenida de Carlos V relaciona la imagen con las de Marco Aurelio, el emperador romano que para los hombres del Renacimiento era el mejor modelo de gobernante virtuoso. El modelo está directamente inspirado en los idealizados retratos de Carlos V realizados por Tiziano (por ejemplo, P410). El trabajo de la armadura, que por su realismo y minuciosidad serían propios de la labor de un orfebre, es de lo mejor de la producción de los Leoni.