Escritorio de doble tapa con moldura protectora en la base de los costados. Estructura compuesta por tablas ensambladas con colas de milano. Asas de hierro en los laterales. El interior presenta muestra con tres calles con siete gavetas y dos puertecillas laterales que repiten los mismos motivos a excepción de la gaveta central, con incrustaciones de mayor tamaño en hueso en las esquinas, con decoración de abanicos. Tiradores metálicos en forma de lágrima.
Decorado con la técnica de taracea, con incrustaciones de hueso y madera de boj fileteada, configurando una decoración geométrica y floral de tipo mudéjar. El hueso se utiliza en pequeñas formas romboidales o triangulares, que alternan con hueso teñido de verde y boj. La frontal presenta al exterior una composición ajedrezada inscrita en dos cuadrados, rodeada de torres, que alternan con motivos florales y de hojas. Todo ello delimitado por filetes de hueso y boj. En los costados aparece una decoración de círculos con pétalos y tallos ondulantes, similar a la que aparece en una arquilla del Museo de Artes Decorativas de Madrid (Nº Inv 2.225) y que se repetirá con frecuencia en las taraceas catalanas del siglo XIX. La tapa lleva dos círculos formando rosetones, entre tallos de boj y hueso, tema usual en la zona aragonesa derivado en última instancia de las certosinas milanesas del siglo XVI. El campo se rellena con florecillas y todos los cajones llevan molduras a bisel taraceadas. Las minúsculas estrellas de seis puntas formadas por rombos y triángulos son una presencia constante en las obras catalanas de pinyonet.
Siguiendo la clasificación tipológica que establece Aguiló, es un tipo de escritorio de los denominados de taracea del siglo XVI con decoración geométrica mudéjar, que tienen en común cubrir toda la superficie, con un claro sentido de horror vacui, y el uso del boj como hilo conductor en la decoración. Pertenece a la evolución propia del siglo XVI. A este grupo se le ha atribuido un posible origen toledano, siendo muchos de sus componentes similares a los de los tallares aragoneses. Otros del mismo tipo se encuentran en el Museo de Artes Decorativas de Madrid (Nº Inv 1.112) y en el Museo de Santa Cruz de Toledo (Nº Inv 11.588)
Se apoya sobre una mesa (Museo del Greco, Nº Inv. CE00588) de época posterior, con patas unidas por chambranas en forma de H. Lleva unas ranuras bajo el tablero, en las que se insertaban unos elementos deslizantes de madera rematados en un pomo tallado, en forma de venera, para apoyar la tapa del escritorio.