Este modelo masculino, con barba partida y manto, no es común en los prototipos de retratos clásicos, ni por lo tanto de las copias, que siguen bastante fielmente sus motivos de inspiración. La larga barba, llamada "tedesca", estuvo de moda en los primeros años del reinado de Carlos V.Se han encontrado personajes similares a éste en el relieve de la Coronación de la Virgen, en la iglesia de San Juan Crisóstomo de Venecia, por Tullio Lombardo (c.1545-1552). Los Lombardo fueron los primeros escultores del Renacimiento que introdujeron modelos antiguos en sus obras y, a veces, los mezclaron con los conteporáneos; en este sentido, el retrato del Prado, parece un personaje del siglo XVI, intentando emular un modelo clásico.