A partir de obras ajenas, Hiepes creó una composición inequívocamente personal. El pintor ha sabido subrayar la simetría, colocando en el centro una gallina desplumada y alternando a los lados la vistosidad del plumaje de pequeñas aves con las masas oscuras de la liebre y el ánade. Sobre la mesa, vísceras y embutidos han sido sometidos al orden geométrico queimponen los recipientes, los óvalos de los huevos y un mantel cuyas líneas actúan como punto de fuga de la perspectiva.