Castellana de cuatro cuerpos, en latón dorado, de perfil ondeado; pieza superior con perfil campaniforme, el resto ovalado. Están esmaltadas en blanco y azul intenso de trasflor y medallón central a la porcelana, en blanco o sepia sobre fondo rosa. Llevan orla de brillantes alrededor, engastados en plata y motivos vegetales tanto en la parte superior como inferior. Se sujetan con eslabones abiertos, algunos en forma de rótulo, esmaltados de azul y blanco con diamante central. Tiene cinco mosquetones, cuatro con tramos de cadena de los que penden llaves de reloj con vidrios imitación carneola. Los temas representados en los esmaltes son propios del estilo llamado pastoril o estilo María Antonieta, con los símbols del amor eterno: la urna, las palomas, las flechas de Cupido. Cuelga del mosquetón central un estuche neceser, realizado en ágata de paisajes, de perfil trapezoidal con guarnición de oro en su tapa, situada en el tercio superior, asa y remate de balaustre. En el interior, tijeras, navaja, lápiz, aguja, punzón y tablilla con las marcas descritas.