Pieza monolítica en forma de jarro de cuerpo acampanado, cuello alargado y boca trebolada. Ágata. La guarnición del pie y la tapa, de oro con esmalte, fueron robadas en 1918. Esta obra forma parte de la herencia recibida por el rey Felipe V (1683-1746) a la muerte de su padre, el Gran Delfín, en 1712.