Parte del segundo jardín del actual Museo Sorolla, visto desde el primero. Este jardín fue el más trabajado por el pintor, con muchísimos dibujos previos. Inspirado directamente en el Patio de la Acequia del Generalife de Granada. En el centro, estanque recortado de azulejería con taza redonda de mármol blanco y macetas de geranios a los lados. Al fondo, dos columnas con capiteles califales enmarcan un Togado romano, regalo que el Marqués de Viana hizo a Sorolla en 1916 destacando sobre el muro rojo de ladrillo. Delante de la escultura, un banco de azulejos.