El combate de gladiadores solía estar precedido de una sesión de esgrima (prolusio) ejecutada en público sobre la arena, sirviéndose de armas de madera. Esta parte del espectáculo les permitía ejercitarse sin poner en peligro su vida, preparándose adecuadamente para la pelea. Además, se permitía a los espectadores aficionados descender a la arena y mostrar a la muchedumbre su talento y capacidad para la lucha. La obra estuvo atribuida a Pietro da Cortona, equivocación comprensible por la proximidad del estilo de Romanelli con el de su maestro.La obra forma parte del encargo de pinturas para la decoración del Buen Retiro.
Tags: