La imagen de Cristo doliente portando la Cruz con una soga al cuello, constituye una genuina producción de la estancia española de Giordano. El artista actualizó un modelo de devoción privada cuyos precedentes iconográficos se remontan a Sebastiano del Piombo (c. 1485/1486-1547) y Tiziano (c. 1489-1576), obteniendo con ello un considerable éxito, como se deduce de las numerosas versiones que se conservan del mismo. Todas ellas reproducen con gran fidelidad la composición aquí expuesta que, por su excelente calidad, puede ser considerado el ejemplar original.