Cofre octogonal de superficie ricamente decorada con motivos florales en oro esmaltado que enlazan los ciento cincuenta y dos camafeos que cubren la tapa y el cuerpo de la pieza. Este cofre es un buen ejemplo del estilo manierista tardío parisino y de la práctica coleccionista de la Francia del momento, pues perteneció en primer lugar al cardenal Mazarino (1602-1661), primer ministro del rey Luis XIV (1638-1715), siendo comprado a su muerte para la colección del delfín de Francia.
Los camafeos, aunque parecen colocados aleatoriamente rigiéndose exclusivamente por un motivo estético, podrían seguir un programa decorativo ya que algunos de ellos representan a los principales dioses y héroes de la Antigüedad clásica. La mayoría datan del siglo XVI y fueron realizados en Italia, aunque alguno podría considerarse más antiguo.
Esta obra fue traída a España por el rey Felipe V (1683-1746) como parte de su herencia, y forma parte del conjunto de artes decorativas conservado en el Museo del Prado conocido como el Tesoro del Delfín.