Está atribuido tradicionalmente al veneciano Domenico Campagnola (1500-1564). Si bien el sombreado cruzado recuerda desde luego a algunos de los excelentes dibujos a pluma de Campagnola, el estilo parece más próximo al de Parmigianino, especialmente en el tipo facial del niño y en el elegante y florido trazo caligráfico, por ejemplo, del ornamentado brazo de la cuna. Sin embargo, la ejecución es demasiado burda para ser del propio Parmigianino, y David Ekserdjian ha sugerido que el dibujo podría ser obra de uno de los seguidores del artista. En realidad hay algunos puntos de semejanza con los dibujos de Jacopo Bertoia (1544-1573/1574).