Una joven de mirada ausente y soñadora parece contemplar un lienzo colocado sobre un caballete, con un gran paño encima, y estampas en un taburete. La indumentaria de tipo japonés, la brillante policromía y la recargada ambientación de la escena, donde prima el efecto decorativo, muestran la extraordinaria influencia de Fortuny y su orientalismo en la pintura de Palmaroli.