Los habitantes de Amberes se divierten patinando en el agua helada de los fosos junto a la muralla de la ciudad. Divididos en grupos, unos disfrazados y otros elegantemente ataviados, representan diversas actitudes y estereotipos propios de la fiesta del Carnaval.
Las imágenes de fiestas y celebraciones en los Países Bajos son comunes en la obra de Denis van Alsloot. Fiel a su costumbre, el pintor realiza una composición muy detallada, donde todos los elementos arquitectónicos están descritos con precisión y las figuras son pequeños retratos en miniatura que muestran la diversidad de la población de la ciudad. Los personajes están ataviados con brillantes colores que contrastan con la fría tonalidad azul de la obra, fruto de la luz filtrada por las plomizas nubes de tormenta.
Se conocen varias versiones idénticas de esta obra, cuya atribución a Alsloot fue durante algún tiempo cuestionada. Está documentada por primera vez en 1746 en la colección de la reina Isabel de Farnesio en el Palacio de la Granja.
Etiquetas: