El estilo del busto del Museo del Prado parece más tosco que el de las obras traídas por Velázquez de Italia, sin embargo, tiene una gran fuerza. Palomino cita la estatua de Laocoonte como la primera entre las obras que "entresacó" Velázquez para traer a España, pero no dice nada sobre un posible busto. Justi (1888) identificó el retrato del Museo con la misión de Velázquez, pero Barrón (1908) apuntó la posibilidad de que se tratara de un ensayo de fundición de la fábrica del Buen Retiro. Hallo (1927) lo consideró de Algardi. Blanco (1957) y Blanco/Lorente (1969) lo catalogaron como renacentista. Harris piensa que se realizó en España. En el catálogo de 1961 Velázquez y lo Velazqueño se publicó como probable fundición de Domingo de la Rioja, realizada en España. La documentación aportada por Montagu (1989) apunta a que puede formar parte de las obras que se vaciaron en España por Jerónimo Ferrer (act. en Roma-Madrid, entre 1649-1657). Este fundidor se trasladó a España con un ayudante, para realizar los vaciados en bronce de los modelos en yeso transportados.Sin embargo, al no aparecer inventariada hasta 1734, no hay que descartar la posibilidad de que fuera vaciada en las primeras décadas del siglo XVIII, ya por otro artista.
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