Busto de tamaño natural de un personaje vistiendo rica armadura, con valona de encaje al cuello y banda bordada que anuda al lado izquierdo. En el centro del peto hay una pequeña imagen de la Purísima Concepción en relieve. Hay que destacar el carácter de orfebre que demuestra el artífice de esta obra. Es muy similar al Retrato de don Juan de Austria  (E00277), aunque los motivos decorativos de la coraza y banda, así como la representación de la Inmaculada, son distintos. En este caso, el rostro tiene más fuerza, debido quizá al carácter del retratado.

Barrón (1908) lo publicó como el "Conde-Duque de Olivares", descubriendo la firma y la fecha. Serrano Fatigati  (1909) recogió un inventario, fechado en 1824, de la Academia de San Fernando, donde se atribuía erróneamente a Pietro Tacca. Tormo (1909) lo identifico como el duque de Medina de las Torres, basándose en la fecha del retrato y en un grabado de Padrino, que se encuentra en la sección de estampas de la Biblioteca Nacional de Madrid. Este personaje fue marqués de Toral, descendiente de una rama de la Casa de Guzmán, y yerno del conde-duque de Olivares al contraer matrimonio con su hija María en 1624, de la que enviudo en 1626. Siendo virrey de Nápoles entre 1637 y 1644 contrajo nuevas nupcias con Anna Caraffa, princesa de Stigliano, una de las mayores fortunas de Italia y, por último, en 1660, con la condesa de Oñate. Tras la muerte de don Luis de Haro en 1661, Medina de las Torres se convirtió en uno de los principales asesores de Felipe IV. Gran coleccionista de obras de arte hizo donación de pinturas al Rey, quizá de este retrato, del de Juan José de Austria (E00277), y del busto de Felipe II (E00266), atribuido a Jonghelinck .

El hecho de que Juan Melchor Pérez sea conocido únicamente por estas dos obras conservadas en el Museo del Prado, hace pensar como ya se plantearon Tormo (1924), Estella y González Palacios (1984), que quizá se trate de un fundidor y no de un escultor. Siguiendo esta hipótesis el retrato de Medina de las Torres, como sugirió Estella y más recientemente Dombrowski, se encuentra dentro de la línea de los mejores trabajos de Giulano Finelli (1601-1653). Por otra parte la fecha que aparece en el busto, coincide con la estancia del artista en Nápoles; además la cabeza se ha fundido por separado y se ha unido posteriormente al busto, que puede ser obra de otro artista napolitano, ayudante de Finelli, Giulio Mencaglia (1615/20-1649), quien por su parte sería el autor del retrato completo de Juan de Austria.