Mario Merz fue un artista italiano relacionado con el arte povera. Empezó a dibujar durante la Segunda Guerra Mundial, cuando fue apresado por sus actividades con el grupo antifascista Giustizia e Libertà. En los años sesenta, la obra de Merz, con energía, luz y materia, lo colocó dentro del movimiento que Germano Celant llamó arte povera, que, junto con el futurismo, permanece como uno de los más influyentes movimientos de arte italiano en el siglo XX. Es famoso, sobre todo, por sus iglúes formados con materiales diversos, que comenzó a confeccionar en 1968. Este artista utilizó de forma frecuente la sucesion de Fibonacci en muchas de sus obras desde la década de los 70, con elementos diferentes (neones,mesas,animales,periódicos... ) y en formatos variados. Así como los números de Fibonacci apuntan al infunito y describen un crecimiento progresivo a partir de la suma de las cifras anteriores, Merz utiliza la famosa sucesión para simbolizar el arte y el progreso social.