La Casa Museo Federico García Lorca se constituye como lugar de memoria histórica y cultural, además de lugar de vida y creación del artista entre los años 1926-1936, ya que la familia García Lorca utilizó esta propiedad como lugar de veraneo. Allí escribió Federico algunas de sus mejores obras: El diván del tamarit, Romancero gitano, Poema del cante jondo, La casa de Bernarda Alba o Bodas de sangre.