Copia romana (h. 170-190 d.C.) de un original atribuible a la escuela de Alejandría (fin siglo II a.C.) Uno de los fenómenos más interesantes del helenismo fue el desarrollo de un sincretismo cultural que intento asimilar y fundir las mentalidades y creencias de los pueblos conquistados por Alejandro y gobernados por sus herederos macedónicos. En Egipto, la creación de un dios greco-egipcio, Serapis, fue empresa muy temprana, inmediatamente seguida por la helenización de Isis, la diosa egipcia más popular.La presente escultura tiene elementos originales de interés: así, si el "nudo isiaco" sobre el pecho y la vasija con asa (situla) en la mano izquierda son atributos comunes de Isis, no lo es tanto el pequeño cuenco (patera) de la derecha, que sustituye el sistro o sonajero ritual. En cuanto a la cabeza, una restauración barroca traiciona por completo el hieratismo de la imagen, olvidando sus tradicionales "rizos líbicos". Procede del Alcázar.
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