Copia de la cabeza del Apolo Belvedere que se conserva en los Museos Vaticanos de Roma. Tiene algunas restauraciones. Existen numerosísimas copias de esta obra desde la primera en 1498, un pequeño bronce, realizado por Antico y que se conserva en la Ca d´Oro de Venecia. En 1540 se realizo un molde del modelo original para Francisco I, que sirvió para vaciar una réplica en bronce que se instalarla en Fontainebleau. A partir de entonces y hasta el siglo XIX el número de representaciones es innumerable. El busto del Prado es una copia fiel que está cerca del estilo de Bernini, en el tabajo de trépano del cabello. En el Palacio de La Granja existe otro ejemplar, que podría ser de Domenico Guidi y  proceder de la colección del marqués del Carpio. La diferencia principal entre este y el del Prado es que el de La Granja no lleva manto.